Monday, June 26, 2006

Justicia Económica según la Fe Bahái

JUSTICIA ECONÓMICA: Aboliendo los Extremos de la Pobreza y la Riqueza

"La unidad de la Humanidad prevista por Bahá'u'lláh es unidad basada en la justicia. Uno de los ejemplos más chocantesde injusticia en el mundo actual es el grave desequilibrio en las condiciones económicas y materiales. Un porcentaje relativamente pequeño de la Humanidad tiene inmensa riqueza. Esta minoría mantiene un control esencial sobre los medios de producción y distribución, mientras que la mayoría de la población del mundo vive en la pobreza y la miseria extrema. Este desequilibrio existe tanto dentro de las naciones como entre las naciones; algunas naciones altamente industrializadas tienen inmensa riqueza, mientras otras permanecen pobres y subdesarrolladas. Sin embargo, la brecha que separa a ricos de pobres continúa ensanchándose cada año, lo que indica que los sistemas económicos existentes son incapaces de establecer un justo equilibrio. Bahá'u'lláh afirmó que la injusticia económica es un mal moral y como tal es condenada por Dios".

"Una de las causas básicas de la injusticia económica es la competición excesiva y derrochadora. Aunque una competición limitada sin duda sirvió como un útil estímulo para la producción durante el período de la historia cuando los medios de producción estaban menos desarrollados, la cooperación debe ahora reemplazarla. Los recursos humanos y materiales a nuestra disposición deben ser usados para el bien a largo plazo de tod@s, no para el lucro a corto plazo de unos pocos. Esto sólo puede ser hecho si la cooperación reemplaza a la competición como la base de la actividad económica organizada".

"Dentro de la estructura de un sistema económico basado en la cooperación, la enseñanza Bahái acepta la idea de la propiedad privada y la necesidad de la iniciativa económica privada. Sin embargo, los principios económicos enseñados por Bahá'u'lláh no implican que todos los individuos deben recibir el mismo ingreso. Hay diferencias naturales en las necesidades y capacidades humanas, y algunas categorías de servicios a la sociedad (educación, por ejemplo) merecen mayores recompensas que otras.
Sin embargo, todos los grados de ingresos o rentas deben estar establecidos dentro de límites absolutos. Debe haber, por un lado, un nivel de ingreso mínimo que satisfaga las necesidades básicas para el bienestar humano y que tod@s tendrán asegurado. Si, por cualquier razón (incapacidad u otro infortunio), el ingreso de un individuo dado es inadecuado para satisfacer sus reconocidas necesidades, él o ella debe ser compensad@ a través del tesoro público. Por otro lado, debe haber un máximo absoluto al nivel de ingreso. A través de progresivos impuestos y otras medidas, se le impediría a un individuo acumular riqueza más allá de este nivel. De acuerdo a explícitas afirmaciones de Abdu'l-Bahá, los "millonarios" no exiastirían en una sociedad basada en los principios Bahái, debido a que sería imposible acumular riqueza vasta e innecesaria".

"Ciertas diferencias en salario continuarían existiendo con el fin de permitir a la sociedad animar los esfuerzos de aquellos (tales como los doctores o los granjeros) cuyos servicios son especialmente vitales para el bienestar de la comunidad; pero estas diferencias estarían definidas dentro de límites absolutos bien definidos, con el fin de garantizar que nadie sufra miseria y que nadie acumule excesiva riqueza".

Traducido del libro "The Bahá'í Faith" - William S. Hatcher & J. Douglas Martin (Harper & Row-1989).

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